- Paso 1: marcar la tela y recortarla
Yo la marco con un lápiz, luego en la lavadora sale, y por la parte interna, la que no se va a ver (por si acaso luego no sale ;p ). Para los círculos de los lados podemos usar algo redondo que pillemos por casa, o un compás o lo que he hecho yo, q es más cutre pero no ha quedado mal, es hacer un punto central y en torno a él marcar la distancia de un radio y 1cm más (pliegue).
- Paso 2: Coser los círculos al rectángulo
No se equivoquen, hay que coserlo por el que mide 17,7. Antes de empezar doblen el cm que dejamos para el dobladillo hacia dento (la parte que será interna). Es más fácil si lo doblamos y lo planchamos. Ahora sí: lo cosemos. Cuidado con el cm que será de la apertura que también hay que doblarlo.
Para coserlo enfrentamos las telas por las partes que serán externas (las que no están pintadas) y que la aguja pase por las líneas internas. Tal que así:
- Paso 3: Coser la cremallera
Ahora cogemos una cremallera bonita y la cosemos en la apertura y metiendo el dobladillo. La cremallera mejor que esté abierta, porque si está cerrada y la coséis entera luego abrirlo va a estar complicado.
La cremallera que usé yo la compre en una mercería ya hace tiempo y me costó 1 euro un paquetito de 4 cremalleras de colores. También se puede usar la cremallera del pantalón pero en mi caso era muy cortita, pero si tenéis una más larga, de un vestido o una falda que este ya para tirar, se descose y se usa, nunca se tira.
No ha quedado mal ¿verdad? Ahora lo que queda es pasarlo por la máquina de coser y adornarlo. Eso será en la próxima entrega.
¡¡¡Sean felices!!!
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