La idea me la dio mi madre y es que ella, a sus 48 años, ha retomado los estudios, y la verdad es que se lo ha tomado en serio y estudia todos los días. Y como buena estudiante ella tenía un estuche donde guardaba sus 4 lápices (guardaba incluso auellos con los que ya no podía escribir porque median un centímetro de tanto uso), 5 bolígrafos, 2 o 3 gomas de borrar, algún afilador con su virutas de lápiz y otras cosas que se encontraba y que iba guardando, eso es algo que hace mucho, por ejemplo un día estudiando se mordió la esquinita de una uña y como le molestaba cogió el cortauñas y la dejó a ras, así sin piedad ni simetría con sus compañeras de mano. Pues después de eso el cortauñas no apareció en 4-5 días. ¿Dónde estará, dónde estará..? Efectivamente dónde iba a estar si no es en el estuche. Lo más seguro es que haya sido un plan malévolo de la mano con la uña asimétrica para vengarse del aparatejo que destrozó el esfuerzo que supone construir una uña.
Bueno pues a lo que iba, que ella tenía un estuche y un día en un examen se lo dejó olvidado en la clase, y no se supo nada más de él. Mi madre se puso muy triste, le tenía hasta cariño. Pues ese será mi primer proyecto del blog: un estuche para mi madre, pero no uno cualquiera, uno personalizado.
Tipos de estuche hay un montón: cilíndricos, planos, triangulares, de madera, de tela, de metal... un montón. Después de pensar y pensar me he decantado por uno cilíndrico y de tela (no me iba a poner yo ahora ha hacer uno metálico).
Entonces ya he hecho el boceto y calculado lo que debe medir (el círculo de 5 cm de diámetro y el rectángulo 18x15,7), es esto:
Bueno pues por ahora es esto. Ya se ha hecho lo más difícil que es pensar, solo que da hacerlo, que intentaré sacar tiempo para ir haciéndolo esta semana. Os iré contando...
¡¡¡Sean felices!!!
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